[Cortos] El skate es el futuro de los videojuegos

Philia
5 min readSep 30, 2022

--

Olli Olli World (2022)

¿A qué género dirías que pertenecen los juegos de Tony Hawk? No me vale decir deportes porque es una etiqueta algo genérica donde podemos poner a Antonio Halcón, Fifa y Wii Sports en el mismo campo. Y creo que ni hace falta jugarlos para saber que hay una una buena cantidad de diferencias entre esos títulos.

La realidad es que el primer Tony Hawk’s Pro Skater se parece más a un plataformero. Tus objetivos son conseguir un par de objetos místicos como las letras de la palabra SKATE o un VHS. La mayoría de las veces necesitarás moverte por el escenario en busca de estos haciendo uso de los trucos, que se realizan con los 4 botones principales de un mando (X, Y, A y B por poner un ejemplo). Estos trucos además sirven para conseguir una puntuación y es mediante la combinación de estos y el escenario que puedes crear combos vistosos, lo cual se mejora en las secuelas permitiéndote alargar el combo con más movimientos.

Skate 3 (2010)

Pero han pasado 8 años y la peña ya se está cansando de esta fórmula. Así que sale Skate, un videojuego que una vez más, no podemos definir del todo en un género. A ver, que también va de montar en una tabla y hacer truquitos pero esta vez es distinto. Esta vez la parte del control más importante es el stick derecho que te permite hacer casi todos los trucos. Sigues pudiendo hacer trucos locos pero eso está más a mano de los que le echan 700 horas y se saben cada rincón del mapa, lo que acaba en una experiencia más realista. Además, la estructura del juego también resulta refrescante. Paseas por el mundo abierto, haces competiciones o consigues X cantidad de puntos en un sitio y pasas al siguiente sin mucha interrupción, al contrario que en los últimos juegos del halcón. Aunque sea un videojuego te imaginas perfectamente que esto podría ocurrir en la realidad.

The Ramp (2021)

Y entonces llega The Ramp, que es un juguete. Inspirado por las versiones en vista isométrica para Game Boy Advance de los juegos de Tony, no hay objetivos. Una rampa, una piscina y poco más. Tienes un botón para hacer trucos generales, otro para grindear y luego el stick para moverte. Diviértete.

El disfrute viene de que al ser un juego tan simple, permite desconectar y relajarte mientras el monigote de la pantalla vibra y se marca unos Nosegrab y Japan.

Un último ejemplo. El reciente Olli Olli World en el que la historia cobra una gran importancia ya que nos tendremos que convertir en una leyenda del skate con ayuda de 4 compañeros que te van enseñando las mecánicas, haciendo chistes graciosos y contando lore.

Al contrario que los demás juegos, los niveles son en total 2D y al principio muy simples. Usa el stick para hacer trucos y saltar y uno de los botones para impulsarte con la tabla. Pero conforme avanzas se van haciendo más complejos volviendo a esa sensación de fluir porque tienes unos reflejos increíbles. Vale que los primeros juegos de los que he hablado también son “difíciles” pero son difíciles de dominar, ya que a la hora de jugar te acostumbras y es sencillito hacer alguna cosa chula.

Vale, ¿toda esta parrafada sobre juegos de skate para qué es? Fácil.

Sencillamente quiero juegos más variados.

Days Gone (2019)

Vivimos en una época donde en 3 segundos puedes resumir la premisa de la mayoría de juegos o son variaciones unos de otros.

¿Cómo le explicas a alguien (que no tenga ni idea) de qué va Ghost Trick? ¿Cómo explicar el cómo se juega y por qué es divertido Death Stranding? ¿Cuál es exactamente la gracia de The Beginner’s Guide si lo único que haces es caminar mientras escuchas a un señor hablar de su vida? ¿Cómo es que vivimos en el mundo donde existe Katamari Damacy?

No es que sean preguntas imposibles de responder pero sí que es algo más dificil de vender que “Un metroidvania con inspiración en los Souls” o “Halo pero con portales”.

Realmente no hablo de mezclar conceptos o algo así sino variaciones en un mismo género. Tony y los otros juegos que he mencionado van de una forma u otra sobre montarse en una tabla y hacer trucos pero cada uno lo aplica de una forma totalmente distinta. Eso es lo que me flipa y me gustaría ver en otros géneros.

Cada vez es más probable que cojas cualquier videojuego y sepas controlarlo sin problemas. Quizá alguna mecánica medio raruna pero vamos, que te desenvuelves bien. Y eso naturalmente no está mal, imagina tener que aprender unos controles para cada juego que juegas en tu vida. Menuda locura. Pero claro, esto hace que los juegos sean menos experimentales y puedes sentir que estás jugando lo mismo pero con otro nombre.

Incluso los indies están pasando en cierta medida por lo mismo. Géneros como el Boomer Shooter, los Roguelikes o los Metroidvania cada vez se sienten más similares. Y sabiendo lo amplios que son los videojuegos y sabiendo lo flexibles que son estos géneros… Parece que todo está ya inventado cuando siempre hay nuevas ideas por explorar.

Rocket League (2015)

Juegos como Trackmania, Rez, los Umihara Kawase o Super Monkey Ball. No es que todo lo que hagan esos juegos sea totalmente original, sino que las cosas que los hacen únicos sólo los veo en esos juegos o sagas (aunque también es verdad que el reciente Neon White parece un Trackmania si Trackmania fuera un plataformero en primera persona y con armas).

Quiza es por eso que últimamente me han atraído juegos de skate, carreras o sigilo. Son géneros donde cada franquicia puede ser un mundo distinto tanto en controles como en estética. Y si hacer juegos “originales” es complicado (que lo es) al menos un poco de variedad en los géneros a los que ya estamos acostumbrados. Porque cuando eso ocurre…

--

--

Philia

Aprendiendo a escribir y pensar sobre videojuegos. twitter: @distarche